Los registros sobre exportaciones nacionales, toman en cuenta como parte importante el volumen y la recuperación que se logra por la venta de minerales
Uno de los últimos registros que maneja el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) en materia de exportaciones y específicamente en lo que corresponde a la venta de nuestros minerales, como materia prima sin valor agregado, depende de la cotización internacional en los mercados externos, que en el último tiempo se han mostrado ciertamente favorables a la producción minera boliviana.
Una interesante nota publicada en Energy Press, apunta que de enero a mayo del año en curso, el valor de las exportaciones de las materias primas mineras alcanzó a 1.370 millones de dólares, mientras en similar periodo del año anterior llegó a 1.153 millones de dólares, de acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y los del IBCE
Es importante señalar que dentro del valor de las exportaciones globales del país, los minerales están catalogados como parte importante del grupo de productos exportados, representando el 43 % de lo vendido en los cinco primeros meses del 2016 y se eleva al 46 % en similar periodo del año presente.
En términos económicos, el sector minero contribuyó de manera positiva a la obtención de divisas para el Tesoro General de la Nación (TGN), la suma de las recaudaciones significaron que el rubro minero, después de mucho tiempo se colocó en el primer lugar de las exportaciones, incluso en un par de meses por encima de las ventas de gas. Sin embargo y por factores ajenos a los sistemas de producción minera y más bien debido a los cambios que genera la alta competencia internacional, los precios de minerales con ciertas variables bajaron temporalmente el nivel de exportaciones mineras.
Según un detalle estadístico las ventas de nuestros concentrados minerales, pasaron en un par de años de 1.000 millones a bordear los 4.000 millones de dólares, hasta el 2016 gracias a un periodo especial en el que los precios de los minerales crecieron excepcionalmente, permitiendo que las exportaciones suban de nivel favoreciendo al sector minero. Ese periodo tuvo corta duración debido al comercio realizado por la China que redujo sustancialmente su demanda de materias primas, aunque la oferta se mantuvo estable, ese hecho influyó en la cotización de minerales generando una disminución en las ventas hasta llegar a un registro de sólo 3.055 millones de dólares en la gestión del 2016.
Pese a las variables existentes en materia de comercialización de minerales los datos financieros señalan que más de 2.000 millones de dólares anuales han ingresado al país por la venta de nuestros concentrados minerales. El comentario se completa señalando que ese monto es necesario para el movimiento de la economía local, según la Fundición Jubileo en su revista 35, afirmando además que la renta minera asciende a 300 millones de dólares anualmente. Es importante recalcar que de acuerdo al informe "ese dinero permite financiar el funcionamiento del aparato estatal y de algunas inversiones".
He ahí un detalle objetivo sobre la importancia que tiene el movimiento minero, pese a sus limitaciones, por lo mismo que en perspectiva de alto rendimiento, es necesario que se dispongan planes de prospección y exploración, para lograr nuevos yacimientos mineros.
Otro aspecto que se considera importante señalar y lo hace la publicación de E.P. es que "los operadores mineros pierden hasta 77 por ciento del valor del mineral al pagar a las fundidoras que extraen el metal. Esas fundidoras son empresas que tienen sus plantas en el exterior , las que además recuperan otros metales valiosos; por lo que el país percibe un promedio de 230 por un mineral que vale 1.000", en la proporción del perjuicio a la economía de nuestros exportadores.
Según los datos del IBCE y del INE, se sabe que hasta mayo de este año, los principales minerales exportados fueron el zinc, en primer lugar, luego el oro, plata, estaño y plomo. El precio del zinc recuperó de manera sorprendente pues hasta julio pasado cotizó a un promedio de 2,8 la libra fina (LF). En el caso del estaño durante la gestión tuvo muchas fluctuaciones, sin embargo, en el segundo semestre se estabilizó en un promedio entre 9,40 a 9,50 dólares la LF. El plomo en julio de este año tuvo una notable alza al cotizar la LF por encima de $us 2,00 Por el otro lado el metal precioso en lo que va del año tuvo buenos registros y de $us 1.260 la Onza Troy (OT) a medio año, subió a 1.299.71 OT al comenzar el último trimestre. Finalmente la plata registra un valor entre 17 y 18 dólares la OT, en lo que va de la gestión presente. De mantenerse esos precios, se estima que las exportaciones de minerales seguirán siendo referente especial para la economía nacional, por lo mismo una vez más se estima necesaria la aplicación de una renovada política minera.
FUENTE La Patria
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